jueves, 29 de abril de 2010

Los libros lloran

La feria del libro fue triste espectadora de situaciones impropias de un lugar pensado para la reflexión, libre expresión y también la pluralidad dada la gran cantidad de charlas y libros de distintas corrientes ideológicas o visiones. El escrache a Hilda Molina, médica disidente cubana, en la presentación de su libro “ Mi verdad” efectuado por militantes procatristas del Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba fue el primer augurio; la médica tuvo que abandonar el lugar dispuesta para la exposición sin poder realizar su disertación. Sin embargo peor aún fue lo acaecido con Gustavo Noriega quién debía exhibir su escrito “Indek: historia íntima de una estafa”, y no sólo no pudo hacerlo sino que la sala Julio Cortázar fue sitio de agresiones inusuales. Junto con Noriega también estaban Beatriz Sarlo y el diputado Claudio Lozano, quienes manifestaron su desazón por lo sucedido.

Los hechos de violencia y falta de tolerancia que ocurrieron, no obstante no deben amenguar a la feria. Hubo interesantes exposiciones realizadas por destacadas figuras del ámbito literario local e internacional y también del periodístico y hasta político.


“ El mundo de la política es muy pequeño dentro del mundo del poder”

Gabriela Cerruti, diputada de la ciudad de Buenos Aires por el Bloque Nueva Democracia, presentó el domingo pasado su libro periodístico sobre Macri, titulado “ El Pibe”, el cuál consta de entrevistas efectuadas al mismo jefe de la ciudad autónoma de Buenos Aires y también a su padre Franco. Según Cerruti, “es la primera vez que hay un candidato nacido en la derecha que puede llegar a la presidencia de manera democrática”

Durante su exposición la ex periodista de página 12, expresó que la diferencia entre su anterior escrito “El Jefe” (una investigación periodística del menemismo), y el actual estriba en “ darse cuenta cuan pequeño es el mundo de la política, dentro del gran mundo del poder”. Asimismo agregó que “ahora puedo relatar los hechos desde otro lado ya que en El Jefe sabía de reuniones que se efectuaban pero no podía participar y ahora sí”( esto en relación su cargo de diputada de la ciudad). Finalmente denunció que “hay un nivel de perversidad y de usurpación del Estado por parte de los grupos empresarios”.

La disertación realizada en la sala Julio Cortázar también tuvo como oradores a los diputados nacionales Daniel Filmus, Margarita Stolbizer y Martín Sabbatella. La principal dirigente del Generación para un Encuentro Nacional (GEN), opinó que “ lo que hace Gabriela en el libro es desnudarnos a todos” y explicó que hay que pensar “ de qué manera el sistema político nos hace cómplices de la irrupción política de los hombres de los negocios”. También añadió “que hay que hacer autocrítica” y que “El Pibe es un repaso por la política contemporánea”. En último lugar manifestó que “ hay una enseñanza a lo largo del libro y es que “ Franco Macri le dice a su hijo que siempre hay que ser oficialistas”. Con respecto a esto Cerruti indicó que “ ese es asunto que los mantiene distantes a Mauricio y Franco”.

Desde la misma óptica que Stlolbizer, Sabbatella expuso que el escrito “ ayuda no sólo a entender la historia sino también el presente” y remarcó el aporte del libro tanto en el marco local como regional “en este momento político y social”. También coincidió con la diputada del GEN, en el hecho que “ no sólo hay que pensar en ellos, sino también en nosotros” ( en referencia al PRO y la centro derecha, en contraposición a la centroizquierda). Finalmente el ex intendente de Morón apuntó que “ hubo una estrategia estos últimos años de manifestar que hay una derecha nueva, democrática, pero no es así” y concluyó que “ hay reacciones de la derecha para mantener sus posiciones”.

Filmus por su parte señaló que “ lo que logra Gabriela es contar como se gesta la trama interna del macrismo” y describió que “ es un libro apasionado, pero no adjetivado”.

Luego de terminado el acto se sucedieron preguntas, y hubo una expresión de Stolbizer importante “ estamos obligado a pensar el progresismo, no desde lo abstracto”

Vale aclarar que esta charla se efectuó el mismo domingo que sucedieron los incidentes contra Noriega en la presentación de su libro, pero tres horas y media antes. Además el diputado Claudio Lozano estaba invitado y había confirmado su presencia, pero no asistió y si en cambio se presentó como panelista en la interrumpida disertación de Noriega, en donde no llegó a hablar. De la misma manera estaba convocado el diputado Adrián Pérez, pero no concurrió.


Debate sobre el periodismo


Jorge Fontevecchia también presentó el domingo pasado en la feria del libro su obra “ reportajes 2”, en una mesa redonda junto a los periodistas Nelson Castro, Magdalena Ruiz Guiñazú, Joaquín Morales Solá, Ernesto Tenembaum, Luis Majul, y Daniel Santoro. Convocados bajo el lema “ el periodismo bajo fuego”, el tema central de los disertantes fue describir el momento que atraviesa la prensa argentina. Al debate fue invitado además Horacio Verbisky quién no aceptó formar parte de la misma y Víctor Hugo que por razones laborales tampoco pudo concurrir ( tenía que relatar un partido de fútbol a la misma hora).

El fundador del diario perfil apuntó que el periodismo está bajo fuego del gobierno, el cuál “agotados los discursos contra el FMI, Bush, las empresas españolas, Menem, los 90 o la dictadura, encontró en Clarín un malo de la talla adecuada como para producir una lucha épica mucho más llevadera que la que mantuvo con el campo”. Además añadió que “Clarín es al periodismo lo que Coca Cola a las gaseosas o Gillette a las máquinas de afeitar, por eso el desprestigio de Clarín afecta la consideración y la estima de todo el periodismo frente a la opinión pública”.



Fontevecchia por otro lado señaló que Clarín en la actualidad “ no para de cometer errores como si fuese una máquina gastada” y espetó que “su redacción reflejó desesperación amateur al pasar de aliado acrítico del Gobierno a opositor inclaudicable, dejando en evidencia que su línea editorial está guiada por los intereses comerciales”. En este sentido también se refirió Ernestina Herrera e indicó que “muestra pésimos reflejos políticos al dilatar el ADN de sus principales herederos aumentando el eventual perjuicio que pueda producirle el resultado y dañándose mientras no se produce”.

En otro tema el director de la editorial perfil, realizó un paralelo entre el comportamiento de la televisión pública ahora y durante la Guerra de las Malvinas. "En ambos casos, en el horario central de la noche de Canal 7 había y hay ahora también un programa periodístico desde donde se hace propaganda disfrazada de periodismo", declaró. Si bien reconoció que la comparación era exagerada, dijo que "resultará útil si vale como antídoto para que no se vuelva a confirmar aquello de que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra".

Finalmente el empresario de los medios concluyó que el periodismo “también está bajo fuego de nosotros mismos, los periodistas, porque en el calor de esta confrontación muchos colegas sintieron, más que nunca, la obligación de colocar la militancia por sobre el periodismo” y de las audiencias “que, fogoneadas irresponsablemente por el Gobierno, se extreman en posiciones irreconciliables y claramente antidemocráticas”.

De igual forma Nelson Castro consideró “ que este es un momento crucial en donde se ponen en juego las convicciones en cuanto a la esencia misma del periodismo” y amplió que esto se debe a que “las situaciones nos ponen en una disyuntiva de reflejar una situación que nos incube” ( en alusión a los carteles anónimos que denunciaban a periodistas que supuestamente estuvieron a favor de la dictadura). El tópico de los escarches anónimos a periodistas, fue abordado también por Majul quién acusó al ex presidente Néstor Kirchner de estar detrás de los ataques “directamente o por omisión”. La periodista radial Guiñazú por otro lado se expresó sobre los escarches en la feria del libro, y dijo que “ todos tienen derecho a expresarse pero no así”.

Allende de esto manifestó su repudió a las juntas populares encabezadas por Las Madres de plaza de Mayo que realizarán juicios éticos a los periodistas y medios que según su perspectiva fueron afines a la última dictadura militar. En este punto coincidió con Morales Solá quién denunció “que hablar de justicia popular en un país como la Argentina es un grotesco”.

Tenembaum por último, en su disertación marcó que hay “ mucha concentración de los medios, pero eso no quita que no nos podamos manifestar en contra de la ley de servicios audiovisuales”. Y concluyó que “ no estamos defendiendo nuestro puesto de trabajo si no que estamos defendiendo nuestro oficio”.